Redacción
Durante los últimos años, se han desarrollado una serie de productos alternativos al cigarrillo que buscaneliminar la combustión (quema, uso de fuego, generación de humo y ceniza) y con ello, la exposición al daño que causa el humo del cigarrillo.
Este es un tema importante para la salud pública: la Organización Mundial de la Salud diagnostica que 1.100 millones de personas fuman en todo el mundo. Además, prevén que esta cifra no variará mucho hacia el 2025.
Ejemplo de otro tipo de productos bajo el concepto de riesgo reducido son los carros eléctricos, el uso de cinturón de seguridad y se puede decir que hasta una sombrilla o el bloqueador solar: no eliminan el riesgo por completo, pero lo reducen significativamente.
Dentro de la relativamente nueva categoría de alternativas al cigarrillo, existen diferentes tipos deproductos:
– Cigarrillo electrónico: dispositivo que está diseñado para calentar un líquido y generar un vapor que consume el usuario. Puede o no contener nicotina.
– Producto de Tabaco Calentado: calientan el tabaco, sin quemarlo, a temperaturas inferiores a los 350 grados. Contiene nicotina que proviene de unidades de tabaco natural.
El principal problema está en el humo
La gran característica común de estos productos es que eliminan el humo del proceso. Pero ¿por qué el humo? Según Yocasta Gil, Gerente de Asuntos Científicos de Philip Morris Centroamérica y Caribe:
“En el humo es donde se concentran la mayor cantidad de sustancias tóxicas y potencialmente tóxicas asociadas con el consumo de cigarrillos. Al eliminar el humo se reduce la exposición a estas sustancias. Aunque no son productos libres de riesgo, reducen sustancialmente la exposición al mismo”.
El proceso de combustión, por ejemplo, del tabaco, ocurre a altas temperaturas de más de 400°C, y es a partir ahí que se incrementa exponencialmente la concentración de sustancias nocivas, tóxicas, que van a causar el daño en la salud de los fumadores, es decir en el humo.
Los dispositivos electrónicos de calentamiento de tabaco exponen el tabaco a una temperaturacontrolada inferior a los 350 grados y nunca llega a quemarlo. Al no haber combustión, no genera humo, y reducen considerablemente la concentración de sustancias tóxicas.
Importancia de la reducción de daños
En algunos países, como por ejemplo Reino Unido, laestrategia de reducción de daño de tabaco implica que se hayan adoptado medidas como el apoyo de los funcionarios de la salud pública a los productos de riesgo reducido, como lo son la inclusión de advertencias sanitarias diferenciadas para estos productos y la reducción de impuestos.
La tasa de tabaquismo en Reino Unido ha bajado un 25% desde 2012. El porcentaje británico de fumadores diarios se redujo del 17,9% al 15,5%, a la vez que el uso de cigarrillos electrónicos se ha incrementó del 4,5% al 5,5% de 2015 a 2019.
El desarrollo y el lanzamiento comercial de nuevas alternativas, como cigarrillos electrónicos y dispositivos que calientan tabaco, están teniendo un importante impacto en la baja del consumo de cigarrillos combustibles, así como en el establecimiento de nuevas regulaciones. Uno de los ejemplos más contundentes respecto de ello es el caso de Japón, donde las ventas totales de cigarrillos cayeron en un 34%, entre 2015 y 2019, lo que puede asociarse con la introducción al mercado de dispositivos electrónicos que calientan el tabaco.
